24 JUN (MEX) .- A pesar de atravesar por uno de los mejores momentos tanto a nivel personal como profesional, Gabriel Soto revela que hace unos días pasó un gran susto con su mascota y aunque afortunadamente las cosas terminaron bien, al día siguiente Irina Baeva lo hizo recordar ese trago amargo con una película.
Durante un breve encuentro con la prensa, el actor reveló que su perro sufrió un par de convulsiones y lo tuvo que llevar al veterinario a que lo revisaran, pero una vez que pasó el espanto, la actriz de origen ruso con quien lleva varios meses de relación amorosa, lo hizo derramar un sinfín de lágrimas.
«El fin de semana estaba con mi perro en la casa y de pronto se empezó a convulsionar y a sacar espuma de la boda, yo les juro que es el peor miedo que he sentido en mucho tiempo, fue horrible. Al día siguiente, Irina me lleva a ver una película de un perro que reencarna muchas veces y tiene como misión juntar a una familia, yo traía todo a flor de piel y entonces lloré como loco», confesó Gabriel.
En otros temas, el actor descartó que le haya molestado no haber celebrado el Día del Padre con sus dos hijas, pues Geraldine Bazán le habló días antes para preguntarle si se las podía llevar a un hotel especial para niños en República Dominicana, y dijo que cuando las niñas regresaron pudo convivir con ellas todo el tiempo.
Fiera Lasa/Mezcalent.com
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