13 DIC (MEX) .- Julián Gil vuelve a pisar los juzgados, sólo que a diferencia de las veces relacionadas con el pleito legal con Marjorie de Sousa por la custodia de su hijo, ahora acudió para defender a capa y espada la fachada de su restaurante puertorriqueño en Miami, la cual está decorada con una monumental bandera de aquel país.
Aunque se había anunciado que esta era la última audiencia y que se finalmente se iba a dar un veredicto sobre si el mural se quita o no, por desgracia no se llegó a ninguna conclusión, por lo que el actor tendrá que esperar hasta enero del próximo año para ir de nueva cuenta a la corte y saber qué pasará con el trabajo artístico.
«Vamos saliendo de la audiencia y aunque tengo una mezcla de sentimientos les puedo decir que el balance es bueno en general. Tenemos que esperar hasta el 23 de enero a la audiencia definitiva porque hoy se empezaron a decir cosas muy incoherentes como que el mural se quedaba si lo pintábamos de otros colores. Yo no puedo hacer eso, no puedo poner la bandera de Puerto Rico ni de ningún otro país de colores que no sean los suyos, es completamente ilógico», dijo Julián en Instagram Stories.
Cabe recordar que la batalla legal por la fachada de «La Placita» comenzó hace un año cuando la Junta de Preservación Histórica y Ambiental de Miami dijo estar en contra del mural, argumentando que el trabajo realizado por el artista Héctor Collazo viola los códigos establecidos por ese cuerpo rector.
Fiera Lasa/Mezcalent.com
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